¡Hola!

Xavier Marín y Paco Narváez pusieron en marcha hace unos años MineStamp, una compañía especializada en la fabricación de marcadores textiles.

¿Cuáles fueron los orígenes de MineStamp?

La idea de crear sellos para marcar la ropa surgió de una necesidad propia que tienen todas las familias: identificar las prendas de sus hijos para que en el colegio, al irse de colonias o en cualquier otra situación sepan que son suyas. El concepto hereda parte de la tecnología de los marcadores de papel, pero tuvimos que darle una vuelta hasta encontrar el producto perfecto.

¿A qué se refiere?

A que para marcar una prenda de ropa se necesita una tinta que sea permanente y resista la acción de todos los lavados a los que se somete. Y las tintas que había en el mercado no lo eran.

¿Cuál fue la solución?

Los sellos MineStamp constan de dos partes muy claras: el marcador en sí y la tinta. De la fabricación del primero se ocupa la empresa austríaca Colop, de cuya filial en España Xavier y yo tenemos el 40% de la propiedad. La tinta se desarrolló en colaboración con una compañía alemana y finalmente conseguimos una que resistiera como necesitábamos y que, además, no se secara con facilidad en la almohadilla del sello, aumentando así su durabilidad.

Realizan dos tipos de marcadores…

Así es. El primer gran tipo es el marcador en formato imprentilla, que consiste en la estructura del sello, la almohadilla de tinta y un alfabeto que, acompañado de una serie de pictogramas, permiten al usuario confeccionar el sello con la leyenda que se busca, generalmente el nombre del niño y algún dibujo alusivo a sus aficiones. Se trata del primer producto de este tipo que salió al mercado y que ha tenido una gran acogida entre el público.

¿A través de qué canales se comercializa?

Una vez tuvimos terminado el primer modelo acudimos a El Corte Inglés para hacer una prueba piloto en dos centros de Madrid y Barcelona. El éxito fue tan grande que los sellos MineStamp se extendieron por el resto de establecimientos del grupo. Hoy en día estamos presentes en las principales cadenas de gran distribución del país: El Corte Inglés, Alcampo, Eroski, Carrefour, Imaginarium… Uno de nuestros principales clientes es tutete.com, pero prácticamente cualquier canal que haga campañas de ‘vuelta al cole’ tiene nuestros productos.

¿Qué diferencia a MineStamp de sus competidores?

Tenemos una patente de utilidad para un sello textil desde el año 2011 que nos hace únicos. De todos modos, cuando un producto funciona es normal que aparezcan imitaciones o plagios contra los que nuestros abogados ya trabajan. En cualquier caso, nuestros sellos son de plástico ABS que en caso de rotura impide que los niños se hagan daño y la tinta es única. Para que se haga una idea, en estos años en el mercado no hemos recibido ni una sola devolución de producto porque el cliente estuviera descontento.

El segundo sello es el personalizado.

Sí. En este caso, lo que hacemos es proponer al usuario final que diseñe su sello a través de nuestra tienda online o de las aplicaciones que ofrecemos a nuestros clientes. De un modo muy sencillo, el cliente elige la leyenda, el pictograma que quiere, la tipografía y en un plazo muy breve (entre 24 y 72 horas) recibe en su domicilio un producto totalmente personalizado en un pack con un diseño muy cuidado que es un fantástico regalo.

El concepto ha hecho fortuna en todo el mundo…

Lo cierto es que sí. Estamos vendiendo en toda Europa, en Australia, en China, en Oriente Medio, en diversos países de Latinoamérica y en Estados Unidos, donde nuestros productos entraron en Walmart hace algunos años y donde contamos con una oficina propia en Miami. Los sellos de MineStamp pueden comprarse en las Galeries Lafayette de París, en Marks & Spencer de Londres y en muchos de los establecimientos más prestigiosos del mundo de la distribución de cada país.

¿En qué están trabajando actualmente desde MineStamp?

Tenemos varios planes en marcha, siempre relacionados con el marcado de prendas o de otro tipo de objetos y con los sellos. Recientemente hemos llegado a un acuerdo de colaboración con Eticlip, una empresa de Manresa con una larga tradición en la fabricación de etiquetas para el marcado de diversos tipos de objetos. También hemos lanzado una gama dirigida al mundo del scrapbooking, en este caso bajo la marca Inkis. Se trata de una serie de sellos de silicona intercambiables que se colocan en un soporte de madera y de una gama de tinta de 20 colores con base agua para los amantes de este tipo de manualidad.